¿AUTOMÓVILES EN EL ANTIGUO EGIPTO?

La historia del antiguo Egipto está envuelta en un aura de magia y misterio. Los mitos bíblicos, la construcción de las pirámides y otros enigmas siempre han despertado la imaginación de la gente. Dejando a un lado la fantasía, y enfocándonos en los acontecimientos y hechos comprobados históricamente, nos asombra el ingenio y la tecnología de aquellos tiempos. Tanto es así, que estuvieron muy cerca de inventar el automóvil.

EL MOTOR

En el siglo I, el ingeniero y matemático egipcio Herón de Alejandría inventó la primera máquina de vapor: la eolípila. Esta máquina constaba de una esfera o cilindro hueco de metal con dos tubos. De esos tubos salía el vapor que impulsaba el mecanismo, sujeto a un eje, haciéndolo girar. Esta máquina estaba a un paso de convertirse en un motor que moviera un vehículo. Pero a Herón se le ocurrió otro uso bien distinto pues lo destinó a ser un juguete para divertir a los niños.

En 1539, el científico, inventor y capitán de la armada española Blasco de Garay decidió aplicar el motor de Herón a una embarcación, creando así el primer barco de vapor de la historia. En 1543 en el puerto de Barcelona hizo una demostración práctica de su invento. Asistieron entre muchas otras autoridades, el rey Carlos I y el príncipe Felipe II. Eran infinitas las ventajas que aportaba esta tecnología. Podría haberse adelantado la revolución industrial más de dos siglos. España casi dominaba el mundo en aquella época. ¿Por qué cayó en el olvido éste y el resto de inventos alucinantes de Blasco de Garay?

EL PARQUÍMETRO

Otra genial idea que Herón puso en práctica fue una máquina expendedora de agua bendita que funcionaba con monedas. Así pues, no le hubiese costado mucho inventar también el parquímetro.

LA CARROCERÍA

A finales del año 1925, en el Valle de los Reyes a las afuera de Tebas, un equipo arqueológico liderado por Howard Carter vio culminado su trabajo. Descubrió un tesoro que había permanecido oculto durante más de 3200 años. Una de las piezas del tesoro se convertiría en la más famosa del antiguo Egipto de los faraones: La máscara de Tutankamón.

La máscara de Tutankamón, es una obra de orfebrería compuesta por dos capas de oro que pesan más de 10 kilos y con un grosor que varía entre 1,5 y 3 milímetros. Contiene incrustaciones de piedras preciosas. La técnica milenaria empleada en su fabricación, el repujado, es precursora de la moderna tecnología PDR.

Dos mil años atrás, el antiguo Egipto podría haberse convertido en el primer fabricante de automóviles. Imagina un vehículo con el motor de Herón y una carrocería de oro en tiempos de Jesucristo. Imagínate conduciendo esas joyas hace dos mil años.

Volvamos a la realidad del presente. En Varilleros Automoción sabemos como cuidar y restaurar las modernas joyas y obras de arte que son nuestros autos. Nuestras mejores habilidades y técnicas, gran experiencia y tecnologías punteras están siempre a tu servicio a un precio sin competencia.